martes, 29 de diciembre de 2009

El abandono escolar

martes, diciembre 29, 2009 by Elena Escobero ·

Un pueblo que no sabe leer ni escribir es un pueblo fácil de engañar…

Así arengaba Ernesto Guevara a la multitud con el fin de estimular e incitar a los “anónimos” durante la revolución cubana. Me llamó mucho la atención esa frase y la quería enlazar con el problema que planteo a continuación.


Vengo observando, según las estadísticas en general, y en Brozas en particular, el crecimiento de la tasa de abandono escolar. Hablemos en esta ocasión de esta lacra en la educación.


El abandono escolar en España se manifiesta claramente y cada vez más, y esto se debe a factores económicos, educativos, familiares entre otros como indican los datos del Injuve. Pero lo curioso de este asunto es que no solo se trata de una desventaja social y económica ya que también se observa esta actitud en aquellos jóvenes que pertenecen a familias económicamente bien asentadas. Los datos son realmente alarmantes pues el abandono escolar en España es de los más altos de Europa, un 29,1% frente a la tasa europea de un 15,3% en 2008, siendo Malta y Portugal los que están por delante y que estos sí han conseguido disminuir las cifras.


Pues bien, una vez expuesto el problema, sus indicadores y correspondientes datos. Creo que todo ello viene dado de la mano de una falta de calidad en la enseñanza del propio profesorado, no tanto en lo sustancial sino en las formas.

El alumno no solo necesita de unos conocimientos sino que hay que despertar en él la curiosidad por aprenderlos, es a lo que llamamos motivación. Así como hizo Paco Centeno en la primera charla en la inauguración de la Escuela de Formación Política, (clase magistral en contenido y en forma).

Creo considerablemente que entre otras muchas soluciones, dada la complejidad del problema, está en la atención y dedicación individual, está claro que un profesor no puede atender particularmente cada caso si tiene veinte alumnos en clase, pero sí hacer más hincapié en aquellos casos que sean subsanables.


Y enlazo esta idea con el caso de Brozas, la generación de jóvenes de entre 16 y 18 años, curiosamente varones, no terminan sus estudios en la ESO o lo hacen en el aula de adultos. Mi hermano es uno de ellos, y entre otros factores, intervino la mala suerte que tuvo con algunos profesores, pues también es de señalar que sus notas eran notablemente aceptables cuando las clases las recibía de un profesor excelente, que sabiendo su poca fuerza de voluntad para estudiar sabía motivarle.


Quizás en Brozas sucede porque encuentran un trabajo que les proporciona independencia económica, pero esta es una situación cortoplacista porque desencadena el fracaso laboral con el tiempo y conlleva a la precariedad.


Por todo ello considero que leer por placer es más producente que estudiar por obligación.


En definitiva y dadas las circunstancias, cambio el somos por el ¿seremos la generación mejor preparada de la historia?

18 comentarios:

María dijo...
29 de diciembre de 2009, 23:54

Elena, ¿sería posible que dieras algún detalle más del dato del 29% de abandono? No sé si quiere decir que uno de cada tres estudiantes no terminan la educación obligatoria o alguna otra cosa.

Feliz navidad!

Luis Salaya dijo...
30 de diciembre de 2009, 2:54

Buen blog y un tema interesante. Enhorabuena.

Creo que esto es parte de esa otra cara de la crisis, la que llevamos sufriendo hace años, esa "crisis de valores" que, aunque en algún momento nos hayamos lanzado a desmentir porque ha sido utilizada por ciertos sectores de la iglesia católica, existe y vaya si existe.

Por suerte, si esto es una consecuencia de esa crisis de valores, ahora que todo se cuestiona por la otra crisis es un momento genial para sacar el tema. Enhorabuena otra vez.

Paco Centeno dijo...
30 de diciembre de 2009, 3:01

Elena, yo creo que el abandono y el fracaso escolar es un tema multifactorial. Tu abundas en una dirección, el papel de los educadores, de los docentes, y que ellos son uno de los responsables de ese fracaso. Pues sí, pero sólo una parte. Está claro que motivar, despertar la curiosidad por conocer una materia y despertar el anhelo de saber por saber es también una tarea de los docentes, que no todos asumen y que no todos sabemos hacer, porque es una labor independiente de los contenidos. Quizás yo no sea un buen ejemplo, aunque te agradezco que digas que la charla te gustó.

Pero hay otros factores determinantes, por ejemplo, que hemos creado una sociedad que valora a las personas por lo que tienen y que hace que los jóvenes quieran ganar dinero antes que ganar competencias, y que hace que prefieran salirse del sistema educativo antes que sacrificar la posibilidad de consumir.

Y también está el papel de la familia, dónde ahora los padres tenemos menos tiempo para nuestros hijos en ese frenesí por una sociedad que casi nos impone tener más para ser más.

Y los docentes desmotivados porque ya no son valorados como antes, dónde los docentes eran una de las fuerzas vivas, junto con el Alcalde y la Guardia Civil.

Y no lo digo con añoranza del pasado, digo que hemos cambiado una sociedad sin cambiar su modelo educativo en todos sus actores: padres, docentes, alumnos, medios y herramientas.

Ya me extiendo demasiado, así que feliz año y seguimos el debate.
Besos

Sostiene Grueso dijo...
30 de diciembre de 2009, 7:09

Por no hablar del interés personal de cada uno, que para mí es el factor mas determinante del fracaso escolar.

Elena Escobero dijo...
30 de diciembre de 2009, 7:31

María, a tu pregunta, concretamnete un 29,6 por ciento no terminan sus estudios, según un artículo de la vanguardia. Me alegra que me cuestiones eso porque me he encontrado, según un reportaje del periódico EL País; un 31 por cieto de adolescentes no aprueban la ESO, el otro 69 por ciento continua pero un 28 por ciento no obtinen ningún título superior, estos son datos de la OCDE. Pero también me he encontrado un informe de la revista "magisterio" afirmando que uno de cada tres alumnos abandonó los estudios tras acabar la ESO en 2008, un 31,2 según datos de Instituto Nacional de Estadística.

Feliz Navidad a tí también.


Hola Luis, gracias. De todos modos también pienso que es la propia crisis la que va a llevarles a estos jóvenes a las aulas, pues antes sí se encontraban con dinero facil en trabajos poco cualificados, ahora no.

Paco, estoy completamnete de acuerdo contigo, de ahí cuando digo la complejidad del asunto. Solo trataba de centrarme en una de las posibles causas y soluciones al problema.

Un saludo.

Elena Escobero dijo...
30 de diciembre de 2009, 7:37

Perdona María, no he concretado, sí el 29 por ciento se refiere a no terminar la educación obigatioria.

AnittaDinamita dijo...
30 de diciembre de 2009, 8:28

Es una lástima que el sistema educativo español se base tanto en memorizar cual papagayo e incentive tan poco al alumno a interesarse por lo que está estudiando y a buscar información por su cuenta.En otros países europeos sobre todo en los nórdicos, el índice de fracaso escolar es casi inexistente, mucho tiene que ver la manera de enseñar...
Es una pena que los adolescentes abandonen tan pronto la educación porque cada vez hay más competencia en el mundo laboral y ni siquiera los que tenemos carrera podemos encontrar un trabajo digno...
Sigue escribiendo Elena!seguiré tu blog!

Juan Antonio Doncel Luengo dijo...
31 de diciembre de 2009, 0:45

Qué profusión de datos. Practiquemos un interesante ejercicio intelectural. En cuanto al de la revista Magisterio, hay una lectura alternativa: luego el 69% sigue sus estudios. ¿Debe eso considerarse un elemento positivo? Desde luego para los "interfectos" sí. Es mejor estudiar que no. ¿Pero el objetivo es que el 100% de la población tenga estudios superiores? Puede que sea un objetivo repleto de interés ético e incluso social, pero está claro que nuestra sociedad tendría que adaptarse mucho a un esquema así de cosas. En concreto, yo defiendo que nuestra tecnología ya nos permite trabajar poco tiempo y dedicar el resto a experiencias vitales no profesionales. Para ello es necesario un profundo cambio de mentalidad que sólo pueden liderar los políticos, pero los políticos líderes, no los que van detrás del rebaño para que ninguna oveja se descarrie. Es absurdo interpretar mayor productividad como que trabajando el mismo tiempo conseguimos más productos. Productos ya hay suficientes. Como no hay reparto adecuado, pues mucha gente no accede a los productos, se trata de producir los mismos con menos esfuerzo (con menos tiempo). Repartir el trabajo, pasar a considerarlo como una obligación social y no como una forma de realización personal, y redimensionar la autopercepción para que las vivencias de cada uno pasen a primer término. En resumen, que la actividad principal de las personas sea su vida interior y la proyección que deseen de la misma al exterior. Perdón por la homilía.

Juan Antonio Doncel Luengo dijo...
31 de diciembre de 2009, 3:12

También me gustaría comentar la intervención de Luis Salaya sobre la "crisis de valores". Quiero decir que, en mi opinión, una difeerencia entre la izquierda y la derecha, diferencia que es histórica y que continúa teniendo validez orientadora, es que la izquierda, en materia de comunidad política, es una tentativa de racionalización del poder: de su entidad, de su naturaleza, de su ejercicio... mientras que la derecha es una opción conservadora en el sentido de que lo importante es el mantenimiento del statu quo aunque para ello haya que recurrirse a elementos variadamente no racionales, como mágicos, simbólicos, religiosos, etcétera. En ese orden de cosas, el recurso a los valores no me parece asumible por la izquierda, y por lo tanto cuando sectores de la izquierda lo hacen suyo se centran, se desizquierdizan, se confunden con la derecha.

Paco Centeno dijo...
31 de diciembre de 2009, 4:10

Importante la observación de Doncel en el contexto del trabajo y su redimensión, "que la actividad principal de las personas sea su vida interior y la proyección que deseen de la misma al exterior". Si no te parece mal la hago mía y pediría que pensásemos en ella.

Y de acuerdo con Doncel en su apreciación a Luis.

Feliz Año a todos

Luis Salaya dijo...
31 de diciembre de 2009, 8:41

Entiendo que la izquierda ha recurrido tradicionalmente a valores o principios éticos como, por ejemplo, la igualdad, la solidaridad... sin que por ello sea menos izquierda.

Feliz Año.

Juan Antonio Doncel Luengo dijo...
2 de enero de 2010, 11:59

Me lo has puesto en bandeja, Luis. ¿Realmente crees que la igualdad es un principio ético, un valor? Que no quiero discutir sobre si lo es o no, sino sobre si tú crees que lo es para la izquierda. La igualdad es un criterio de organización social que a) es profundamente político; b) es esencialmente político; c) es estratégicamente político. De ese modo, la sociedad de la igualdad no lo es como ética, ni como estética, sino como política. Para la derecha, incluso bajo la denominación de centro derecha, la igualdad es una cuestión ética, moral si quieres. En mi opinión, cuando alguien de izquierdas dice "el appartheid es injusto" no se refiere tanto a que sea inmoral o repugnante como a que hay que cambiarlo porque todos somos iguales y eso no es real ni bonito ni caritativo ni ético ni moral ni leches, eso es como queremos que sea la sociedad.

Hitos dijo...
2 de enero de 2010, 17:53

Ahora si habla de la generación nini, ni estudian ni trabajan.

El comentario es sólo para crear más debate.

Feliz año.

Juan Antonio Doncel Luengo dijo...
3 de enero de 2010, 0:10

También podríamos hablar de la generación hortelana, ni estudian ni trabajan ni dejan estudiar ni dejan trabajar.
Es sólo para seguir creando más debate

Elena Escobero dijo...
3 de enero de 2010, 6:22

Si puede ser, pero en todo caso se trata de un colectivo determinado, yo hablo en concreto de uno. No se puede generalizar... también estamos los que luchamos por formarnos como profesionales y como personas para proyectarlo algún dia en la sociedad para hacer de esta un poco mejor...

Jose dijo...
4 de enero de 2010, 13:46

Estoy completamente de acuerdo contigo Elena. Yo creo que existe un pequeño porcentaje de alumnos tan fuerte (en el sentido de constancia, responsabilidad, ideas claras, madurez..) que podría sobreponerse a casi cualquier circunstancia, otro pequeño porcentaje de alumnos tan débiles que les sucede lo contrario.. y una amplia mayoría que se ve influida por muchísimas cosas.

El profesor puede intervenir muchísimo tanto para lo bueno como para lo malo, y también las compañías. Nunca me olvidaré de los casos de compañeros mios de colegio cuya principal motivación era hacer reir a los demás, aunque para ello tuviera que tirar todo por la borda.
Lo triste de todo esto es que tenemos que tomar las decisiones más importantes de nuestra vida cuando nuestro nivel de madurez es menor, mientras que conforme vamos adquiriendo madurez nuestra vida empieza a estar más y más resuelta. Dentro de unos años se arrepentirán de ello, pero ahora ven las cosas así.

En mi humilde opinión, quizá lo más importante es tener interés por la vida, por luchar por tus sueños, por ir hacia lo que verdaderamente te hace feliz, bien sea trabajar o estudiar. Aunque para ello haya que sacrificar mucho tiempo de preparación en forma de un "gran proyecto". El problema es que los jovenes de hoy solo miran a corto plazo.. el beneficio inmediato.. y eso es bastante triste.

Un saludo amiga,

Jose.

Hitos dijo...
4 de enero de 2010, 17:00

Jose, los padres somos responsables de la educación de los hijos cuando estos aun no han madurado (espero que los míos maduren prontito)

En el caso que plantea Elena no ha comentado el hecho de que los padres de Brozas decidieran que sus hijos hicieran 1º y 2º de la ESO en Brozas en lugar de trasladarse a Alcántara (que era donde les correspondía realizar estos estudios).

Fue una medida política que le afectó a los chavales. En Brozas no disponían de los mismos medios de los que está dotado Alcántara.

Creo lógico que la junta no ponga un instituto de enseñanza secundaria en cada localidad cuando esas localidades no tienen suficientes alumnos, en estos casos lo lógico es comarcalizarlos ¿se dice así? o mancomunarlos (ese es otro tema sin resolver, las comarcas o mancomunidades de servicios de la junta, hay miles)

El caso es que sufren un salto cuando llegan a 3º de la ESO, la formación es inferior en ciertos aspectos y puede provocar el rechazo o la inadaptación. Son años fundamentales para seguir la formación a buen ritmo y encima complicados porque entran en la edad de la tontuna o pavo.

Todo esto es desde mi punto de vista. Puedo estar equivocada.

Elena Escobero dijo...
5 de enero de 2010, 7:40

Jose una sorpresa muy agradable verte por aquí, tu humilde opinión es bien recibida y de todo lo que dices me quedo con tu último párrafo... el tiempo que se sacrifica no es tiempo perdido si el motivo es una fuerte convicción y hay pasión de por medio, es más, diría que proporciona placer, eso para sentirse realizado, en el ámbito que sea.

Hitos, estoy de acuerdo con lo que dices. Sinceramnete creo que los problemas, independientemente de la condición del perfil de los distintos alumnos, aparecen en el momento en que salimos de la familia protectora de nuestro colegio. Alcántara supone un giro radical, pues tienes que vencer una serie de incovenientes y lo más fácil es descarriarse, es lo más cómodo. Para evitar eso es esencial una actitud sensata y no caer en tentaciones.

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